En esta entrevista, Hernán Henríquez, director de la Escuela Básica de Puquillay ubicada en Nancagua, nos habla sobre los principales desafíos y avances en el aprendizaje de la lectura en su establecimiento escolar, destacando la colaboración con la Fundación María José Reyes (FMJR), que ha sido clave para mejorar los estándares de calidad y apoyar a estudiantes con rezago lector.
¿Cuáles son los principales desafíos que enfrentan en el aprendizaje de la lectura en su establecimiento escolar?
Diría que enfrentamos dos grandes desafíos. Primero, la normativa ministerial y todo lo que implica en términos curriculares y planes de estudio. Nos sumamos a los ajustes y priorización curricular, y dentro de esto, el lenguaje es fundamental. Segundo, también debemos rendir el SIMCE en 4.º, 6.º y algunos años en 8.º básico, lo que hace que el tema del lenguaje sea clave.
¿Cómo evalúa la colaboración entre su establecimiento escolar y la Fundación María José Reyes?
Llevamos casi cuatro años colaborando con la Fundación. Esta relación ha sido clave para mejorar nuestros estándares de calidad, especialmente en los cursos de segundo y tercero básico. La Fundación realiza diagnósticos y trabajos científicos previos para focalizar el apoyo a grupos específicos de estudiantes. Además, ofrecen monitoreo y apoyo tanto presencial como virtual, y hay una gran colaboración interna en nuestra comunidad escolar.
¿Qué resultados han observado en los estudiantes con la implementación del programa Rescate Lector?
El programa Rescate Lector ha sido fundamental para complementar el trabajo de nuestros profesores, enfocándose en estudiantes con rezago lector significativo. Hemos observado avances notables en la adquisición de habilidades lectoras, especialmente en aquellos niños que inicialmente no leían o tenían una lectura muy básica. Además, la Fundación nos permite trabajar con estudiantes con necesidades educativas especiales, lo que complementa nuestro enfoque en habilidades transversales.
¿Colaboran con bibliotecas locales u otras instituciones culturales para enriquecer el aprendizaje de la lectura? ¿De qué manera se lleva a cabo esta colaboración?
Sí, trabajamos con la biblioteca municipal y seguimos participando en las convocatorias municipales, incluso después de cambiar de sostenedor en 2021. Hemos llegado a instancias nacionales con el programa ‘Yo Aprendo a Leer’ y ‘Yo Leo’ de la Fundación Luksic.
¿Cómo visualiza el desarrollo del aprendizaje de la lectura en su establecimiento escolar en los próximos cinco años?
Visualizo un desarrollo positivo y continuo en el aprendizaje de la lectura, con prácticas institucionalizadas que se mantendrán independientemente de cambios en la dirección. La clave será seguir respetando el marco regulatorio del Ministerio y continuar con el perfeccionamiento de profesores y ayudantes de aula. Además, buscaremos mantener y mejorar los niveles de aprendizaje, ofreciendo las mismas o mejores oportunidades a nuestros estudiantes.
¿Cómo cree que la Fundación puede seguir colaborando en el apoyo del aprendizaje lector de los alumnos de su escuela?
La Fundación puede seguir colaborando adaptando su oferta a nuestras necesidades emergentes. Hoy, su apoyo en lenguaje es fundamental, pero también sería valioso considerar el ámbito socioemocional, especialmente en el contexto post-pandemia. La generación de nuevas oportunidades y el perfeccionamiento continuo de nuestros profesores y ayudantes de aula también son áreas donde la Fundación puede seguir haciendo una diferencia significativa.