La Fundación María José Reyes presenta su nueva campaña de recaudación de fondos: “Donde nadie llega”, una invitación a conocer —y apoyar— el trabajo que realiza con niñas y niños en contextos de alta vulnerabilidad y con escaso acceso a redes de apoyo, en la región de O’Higgins.
A través de una serie de testimonios audiovisuales, la campaña muestra el impacto concreto de sus programas en escuelas que, debido a su ubicación geográfica o condiciones sociales, enfrentan desafíos significativos: estudiantes que han estado fuera del sistema escolar durante largos períodos, comunidades rurales multigrado, niños y niñas migrantes, o estudiantes que requieren apoyo psicológico al que sus familias no pueden acceder por falta de recursos o cobertura pública.
Los programas de la Fundación —Rescate Lector y BienEstar— abordan estas necesidades trabajando directamente con las escuelas, tanto en la nivelación de aprendizajes en estudiantes con rezago lector, como en la entrega de acompañamiento psicológico gratuito a quienes enfrentan dificultades emocionales. El objetivo es claro: ofrecer una oportunidad real para que cada niño y niña pueda reconectarse con el aprendizaje, con sus pares y consigo mismo.
“Trabajamos en lugares donde el acceso a recursos no está garantizado, pero donde hay un enorme potencial. No llegamos a ‘ayudar’; llegamos a vincularnos, a escuchar, a trabajar con las comunidades”, afirma Sergio Reyes, presidente de la Fundación.
Desde su creación en 2014, la Fundación María José Reyes ha acompañado a más de 3.000 estudiantes en la región de O’Higgins, implementando iniciativas que combinan intervención pedagógica y apoyo socioemocional, con un enfoque centrado en la dignidad, la pertenencia y el desarrollo integral.
La campaña invita a quienes creen en la educación como motor de equidad a sumarse con un aporte que permita seguir llegando donde nadie más llega.
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